El dentie es un producto macrobiótico utilizado para solucionar patologías bucales como periodontitis, gingivitis, glossitis, piorrea, aftas y dolor de muelas. El dentie es un polvo negro elaborado con cenizas de berenjenas saladas. Se aplica encima de la pieza dental dañada y el dolor desaparece. Para los problemas de encías, se recomienda emplear el dentie como dentífrico solo por la cara exterior, cada noche antes de acostarse. Lo utilizaremos 15 días seguidos y descansaremos una semana, después reiniciaremos su uso 15 días más.
¿Cómo elaborar el dentie en casa?
Los ingredientes que necesitarás son: una berenjena + sal
Elaboración:
Primero tostaremos la berenjena en el horno hasta que quede carbonizada, lo que te llevará una hora y media aproximadamente de horno.
Aparte, tostaremos sal en una sartén y triturremos la berenjena y la sal en un mortero. Las medidas son: 1.c.s (cucharada sopera) de berenjena carbonizada por 3 c.s de sal. Lo trituramos en el mortero hasta que quede muy fino.
Para utilizar el dentie podemos elaborarlo en casa, como hemos indicado, o podemos adquirir la pasta de dientes «dentie» que venden ya elaborada en las tiendas de alimentación biológica.
Más allá del uso del dentie, es importante tener en cuenta la composición de los dentífricos que empleamos a diario. La mayoría de ellos contienen ingredientes agresivos y nocivos. Uno de estos ingredientes que conviene evitar es el flúor.
Los graves peligros del flúor
Las pastas de dientes son imprescindibles para la salud bucal y debemos evitar las que contengan flúor. En los supermercados todas las pastas de dientes lo contienen.
El flúor está clasificado en toxicología clínica como más tóxico que el plomo, y solo algo menos que el arsénico.
Los fluoruros son un producto residual de diferentes sectores como por ejemplo el de la industria de fertilizantes, que evitan de esta forma los gastos de gestión de residuos y además obtienen el beneficio de la venta.
La acumulación de flúor en nuestro organismo, aunque sea en dosis bajas, puede causar a medio plazo alteraciones sistémicas relacionadas con la producción de algunas hormonas y desequilibrios inmunológicos. Asimismo, en algunas personas ocasiona la aparición de afecciones como la dermatitis perioral. Es por eso que conviene estar atentos no solo a lo comemos sino a los productos que utilizamos en nuestra higiene diaria, incluida la bucal, y optar por dentríficos que sean suaves, elaborados a base de plantas como salvia, mirra, arcilla blanca,… y que no contengan químicos ni componentes que alteren la flora bucal ni su pH.
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Las verdudas fermentadas, también llamadas encurtidos o pickles, son alimentos con interesantes propiedades: nos ayudan a hacer la digestión porque nos aportan enzimas y ácido láctico. Favorecen el buen funcionamiento del hígado y contribuyen a augmentar la concentración mental y fortalecimiento de la visión (el hígado es el órgano que da fuerza a los ojos).
Los pickles permiten conservar los productos vegetales durante mucho tiempo, con la ventaja de que sus propiedades nutritivas se mantienen.
Son ideales para preparar la digestión y fortalecer los intestinos. Durante el proceso de fermentación, las enzimas y
bacterias transforman el azúcar de las verduras en ácido láctico, que fortalece la flora intestinal. Hoy en día se usan pickles comerciales altamente condimentados, ya que están elaborados con azúcar y vinagre, que destruyen la flora intestinal.
Uno de los grandes beneficios que se atribuye a los alimentos fermentados es el de restablecer el equilibrio entre los diferentes microorganismos que pueblan nuestro intestino. Entre todos estos microorganismos destacan los del género: Lactobacilus acidophilus, Lactobacilus bifidus, Lactobacilus plantarum, Lactobacilus leichmanii y Lactobacilus fermentum.
La mayoría de estos lactobacilus cuando llegan al estómago (medio ácido) no sobreviven, pero algunos, sin embargo resisten y pasan a repoblar el intestino. Una dieta rica en carbohidratos y escasa en proteínas animales también favorece el desarrollo de los lactobacilos. Bien es sabido que cuando un cereal se corrompe, fermenta; en cambio, cuando se corrompe un producto animal, este acaba pudriéndose. La fermentación equivale a una predigestión de los alimentos, que se transforman en sustancias de más fácil asimilación. El almidón, por ejemplo, se transforma en maltosa y esta en glucosa, la cual a su vez se transforma en ácido láctico.
Dentro de este grupo de alimentos, el miso, umeboshi, salsa de soja tamari y tempeh son alimentos recomendados, cada uno de ellos con sus propios beneficios.
Fermentados más recomendables para consumir frecuentemente
Umeboshi: Es, sin duda, el mejor fermento. Es una ciruela fermentada con sal marina durante más de 2 años. Sus propiedades medicinales son incalculables: alcaliniza la sangre, tiene efectos antibióticos y antisépticos, previene la fatiga y retrasa el envejecimiento. Ayuda a resolver los problemas de salud tanto de tipo yin como los yang. Utilizarla en caso de falta de apetito, diarrea, estreñimiento, intoxicación, náuseas, resfriados, gripes… El vinagre de umeboshi es ideal para aliños, salsas y aderezos. (Se recomienda tomar 2 o 3 ciruelas a la semana).
Miso: es una pasta de color marrón y de sabor salado, producto de la fermentación de la soja con determinados cereales y sal marina. El miso es ideal para enriquecer (tanto en sabor como en propiedades) sopas, estofados, salsas, aliños, patés y cualquier plato en general. Añadir siempre el miso después de la cocción y dejarlo activar uno o dos minutos. No hervirlo nunca. Es recomendable tomar sopa de miso una o dos veces al día (los japoneses la toman en desayuno, comida y cena).
Salsa de soja: es un producto similar al miso, aunque su consistencia es líquida. Usaremos dos clases de salsa de soja: shoyu y tamari. Este último como medicamento en caso de enfermedad o de fatiga.
El tempeh: proteína fermentada de la soja amarilla. Originaria de Indonesia, ha ido ganando popularidad debido a su gran poder nutritivo. Es una alternativa ideal a productos de origen animal. Se encuentra en el
mercado de 2 formas: fresco y macerado.
¿Cómo preparar alimentos fermentados?
Se recomienda utilizar principalmente las verduras de raíz y rastreras. La forma de prepararlos es la siguiente:
Se limpian las verduras y se cortan a rodajitas (zanahoria, cebolletas, rabanitos, etc).
En un bote de cristal con tapa hermética ponemos, alternando, las verduras y la sal o salsa shoyu, o miso, umeboshi, etc. Y un poco de agua hasta cubrir el contenido.
Se tapa con una gasa (rodeada con una goma elástica) y se sitúa en una zona fresca y seca de la casa.
Tiempo: normalmente de una a dos semanas. Pasado este tiempo se puede tapar herméticamente. Hay que tener en cuenta que si aparece moho en la superficie del alimento fermentado, debe retirarse para comprobar si las verduras están crujientes. En caso de que las verduras estén blandas y pegajosas, habrá que tirarlas. Esto puede ser debido a dos causas:
– se ha añadido poca sal u otro condimento salado
– hay un exceso de calor en el lugar donde se guardaban.
Cuando haya transcurrido los días recomendados, si comprobamos que las verduras están duras pero extremadamente saladas, debemos dejarlas en remojo en agua fría durante unos minutos antes de consumirlas.
El líquido de los pickles que queda después de haber comido todas las verduras, puede aprovecharse como aliño para ensaladas. También se puede utilizar la mitad para empezar otro bote de pickles, añadiendo agua fresca y más condimento salado.
Una cucharada de encurtido se puede mezclar con la ensalada en verano.
Se recomienda empezar cada semana con un pickle diferente para, de esta forma, obtener mayor variedad de verduras, colores, texturas y sabores. En la preparación de los pickles caseros, lo más difícil es saber ajustar la sal u otros condimentos, la presión (apretaremos las verduras en el bote) y el nivel de agua que podemos añadir.
La variedad de pickles que podemos hacer depende solo de nuestra imaginación.
En numerosas ocasiones me preguntan «¿Qué puedo untar en el pan?«. Hoy propongo una opción muy saludable y sencilla de preparar, un paté de olivas negras para acompañar el pan de vez en cuando.
¿Qué ingredientes necesitas?
100 gr de olivas negras
1 cucharada sopera de miso blanco o shiro miso
3 cucharada sopera de aceite de sésamo
1/2 cucharadita de orégano
1/2 cucharadita de tomillo
1/2 cucharadita de romero
1 cucharada sopera de semillas de sésamo tostadas.
Preparación:
Dejar en maceración la noche anterior las olivas con el orégano, el tomillo, el romero y el aceite. Todo ello en un recipientede cristal tapado.
Al día siguiente, sacamnos las aceitunas, les quitamos el hueso y añadimos el miso.
Mezclamos las aceitunas, las semillas de sésamo, el aceite y a continuación trituramos todos los ingredientes.
Añadiremos más aceite si lo queremos convertir en una salsa.
Se puede conservar en la nevera algunos días.
Este paté de olivas u olivada tiene grandes beneficios para nuestra salud, ya que las aceitunas negras:
Contienen ácidos grasos insaturados monoinsaturados que contribuyen a reducir el colesterol LDL (llamado «malo») y a aumentar el colesterol «bueno» (HDL), por lo que son adecuadas para prevenir enfermedades cardiovasculares.
Elevado contenido en vitamina E, un poderoso antioxidante.
Indicadas en casos de anemia por su gran contenido en hierro.
Elevado contenido en vitaminas A y C que mejorarán nuestras defensas.
La alimentación, como siempre, es la base de nuestra Salud. Actualmente el sistema tiene especial interés en la hipermedicación de la población, incluso para situaciones que no son ni patologías. El objetivo es el negocio y cronificar cuantos más mejor. En este sentido la alimentación es el rival de la industria, porque desde hace mucho tiempo está constatado que resuelve innumerables trastornos.
En línea con este planteamiento, me gustaría informar que patologías como el cáncer, también pueden restablecerse, según el caso, a través de la alimentación. Un nutriente clave para el cáncer es la vitamina B17, que se encuentra principalmente en las semillas de manzana y albaricoque, pero también está presente en:
Arroz integral
Avena
Mijo
Cebada
Garbanzos
Lentejas
Almendras
Nueces
Anacardos
Frutos rojos
Ciruela
Mandarina
Semillas de chía y lino,…
¿Cómo tomar las semillas de manzana o albaricoque biológicos?
En cuanto a las semillas de manzana, ante todo se recomienda que las manzanas sean biológicas. La pauta aproximada es no superar 10 semillas diarias y repartirlas en 3 tomas.
Para tomar la semilla de albaricoque (dos diarias) será necesario partirla mediante un martillo y comer la semilla interior.
La venta de la vitamina B17 en forma sintética, que en este caso recibe el nombre de Laetrile, no está permitida en algunos países, ya que se escudan en que posee cianuro, pero este elemento no llega a nuestras células, ya que es neutralizado por la enzima rodanasa de nuesto organismo.
Terapia con la vitamina B17 o Amigdalina
Las semillas de estos frutos y alimentos mencionados no sólo son aconsejables tomarlos cuando se está enfermo, sino que constituyen un potente preventivo del cáncer.
¿Qué otras propiedades tiene la vitamina B17?
Contribuye a la formación de ácido fólico
Es necesaria en el metabolismo de las proteinas
Facilita el mantenimiento de la salud de la piel y el cabello. Es especialmente idónea en caso de padecer acné, eccemas, esclerodermia y para las quemaduras.
El efecto de la vitamina B17 se puede ver potenciado por otras vitaminas y minerales, entre las que destacan los betacarotenos, vit A y C, y las vitaminas del grupo B. Además, la vitaminaB17 interactua con la enzima Rodanasa de nuestro cuerpo, que tiene un importante papel detoxificador.
Después de superar resfriados, gripes, fiebres,…que acompañan el frío invernal, la macrobiótica recomienda consumir alguna proteina más yang, como es la del pescado. Por eso hoy os propongo una sopa calentita de pescado para reconfortarnos en estos últimos días de invierno.
¿Qué ingredientes necesitas?
400 gr de cabezas de rape pequeño (opcional)
2 cabezas de merluza pequeña (opcional)
100 gr de pescado de roca
250 gr de mejillones de roca
250 gr de almejas medianas
Arroz integral cocido (la cantidad es al gusto)
2 cebolletas
1 zanahoria cortada a palitos
Un chorrito de aceite
Una pizca de sal
Unas hojas de perejil
1 hoja de laurel
1 ramita de tomillo
35 gr de piñones tostados
2 cucharadas soperas de alga arame ya cocida
Cómo preparamos la sopa:
Se lava el pescado y se pone a hervir en una cazuela junto al laurel, el tomillo y una pizca de sal.
Una vez cocido 30 minutos a fuego medio, colamos el caldo en un colador muy fino y separamos los trocitos de pescado de las espinas.
En una cazuela a parte ponemos un poco del caldo de pescado y añadimos los mejillones bien limpios y los coceremos unos 8-10 minutos. Si hay alguno que no se abre lo desecharemos. Los sacaremos del caldo e introduciremos las almejas hasta que también se abran.Las conchas se retiran.
En otro recipiente salteamos con un chorrito de aceite las 2 cebolletas (cortadas muy finas, tanto su parte blanca como la verde) y la zanahoria cortada a palitos. Cuando hayan soltado el agua, añadiremos una pizca de sal y un poquito del caldo de pescado y las dejaremos cocer hastaque estén blandas.
Añadiremos ahora a las cebolletas, el caldo del pescadoy del marisco, los trocitos de pescado, las almejas y mejillones sin las conchas y el arroz integral.
Servimos la sopa bien caliente y pondremos el alga arame y los piñones tostados por encima como guarnición.
El krill es un crustáceo de alto valor nutricional que tiene un elevado contenido en Omega-3. El Omega-3 es necesario e imprescindible para el organismo, ya que nuestro cuerpo no es capaz de fabricarlo por sí mismo y necesita de ciertos alimentos para conseguirlo. Es necesario en la dieta diaria tanto para los jóvenes como mayores. Previene la aparición de muchas enfermedades.
El krill habita en aguas supericiales de todos los océanos. Es uno de los animales más abundantes del planeta. El Krill antártico es el más utilizado para consumo humano. Esta especie supone más de 500 millones de toneladas. Su tamaño es diminuto y como máximo mide 5-6 cm de longitud.
Este alimento es una fuente nutricional rica en proteínas y ácidos grasos poliinsaturados. Tiene una potente combinación de antioxidantes protectores del corazón y del sistema cardiovascular.
¿Qué propiedades tiene?
En Europa podemos consumir el Krill en forma de extracto seco o perlas de aceite. Las propiedades del krill son:
Fortalece el sistema inmunológico
Actua como un potente antiinflamatorio natural
Nos ayuda a controlar el colesterol y niveles de triglicéridos.
Contribuye al equilibrio hormonal.
Aporta energía y reduce la fatiga.
Protege el buen funcionamiento cerebral y promueve el correcto funcionamiento del Sistema Nervioso.
Está indicado en casos de insomnio.
Mejora la memoria
Fortalece huesos, cabello y dientes
Promueve la elasticidad cutánea.
Disuelve cálculos renales.
Protege el funcionamiento hepático.
Es un gran alimento preventivo contra la demencia.
Está indicado para las personas que padecen fibromialgia y síndrome de fatiga crónica.
Su consumo más frecuente es en perlas o càpsulas de aceite, usado como suplemento dietético por sus propiedades nutricionales y medicinales. Solo los japoneses lo consumen como alimento de forma habitual, lo llaman okiami.
Cabe destacar que su contenido en omega 3, además de estar indicado en patologías como la fibromialgia i personas con hipercolesterolemia, tiene la propiedad de prevenir e inhibir el desarrollo de ciertos tipos de cáncer y se emplea también para paliar los efectos de los tratamientos que combaten esta enfermedad.
Los cocineros de medio mundo no han pasado por alto esta exquisitez oceánica y lo han incorporado en muchos de sus platos.
¿Qué es el tempeh? El tempeh es un alimento fermentado a partir de la soja amarilla. Es una proteína muy digestiva y de gran valor nutritivo. Entre sus propiedades cabe destacar su gran valor antioxidante y su importante contenido en vitamina B12. También que es un antibiótico natural utilizado contra enfermedades intestinales.
Muchas personas desconocen el tempeh y sus diferentes presentaciones. El tempeh lo encontramos en herbolarios, mercados de productos orgánicos y podemos adquirirlo natural o macerado con tamari. En la receta que os propongo he elegido el tempeh macerado con tamari, que dotará de la preparación de un sabor más intenso y agradable.
A principios del siglo XX, René Quinton revolucionó la ciencia médica utilizando el agua de mar en sus pacientes, ya que observó que existe una identidad fisiológica entre el medio marino y el medio interno del organismo humano.
Teniendo en cuenta que somos un 70% agua, el agua de mar es un elemento terapéutico fundamental. En Francia y subvencionado por la Seguridad Social fueron atendidos miles de pacientes hasta 1970.
En palabra de Quinton: “Para vencer la enfermedad hay que reforzar el terreno con agua de mar pura isotónica. El suero marino se opone a la mayoría de enfermedades, es más eficaz que el suero artificial. En la 1ª Guerra Mundial el ejército francés empleó agua de mar isotónica en transfusiones, para compensar la pérdida de sangre de los heridos en combate”.
Quinton anota: “La vida se originó en el mar, cada cuerpo humano es como un pequeño océano en el que flotan las células. Si este océano mantiene su condiciones físicas (pH, salinidad, temperatura, etc…) el cuerpo se mantiene en salud”.
El cuerpo humano capta los nutrientes en forma selectiva, primero siempre toma los elementos en forma orgánica antes que los inorgánicos. En el agua de mar se encuentran todos los elementos de la tabla periódica en su forma orgánica y biodisponible, y en proporción correcta para la nutrición celular. Por ejemplo, si tenemos estroncio 90 radioactivo en el ambiente y nuestro organismo necesita este elemento, primero lo tomará en forma orgánica. Si no existe en forma biológica lo captará. Por tanto, si tomamos agua de mar nos protegemos de micro elementos radioactivos o de otros tóxicos.
Sabemos que Platón ya usaba el agua de mar para curarse de sus enfermedades. Pero poco a poco, el hombre empezó a olvidarse de sus beneficios, hasta que René Quinton empezó a investigar y a tratar pacientes con enfermedades como la tuberculosis, el tifus, cólera, gastroenteritis, psoriasis, desnutrición infantil, etc. con un gran éxito.
Actualmente hay un relanzamiento mundial del agua del mar. Existen numerosos dispensarios marinos en los que se ofrece agua de mar limpia gratuitamente. Hay 10 millones de niños desnutridos y el número de personas desnutridas va en aumento.
Ha llegado el momento de aprovechar todos sus beneficios. El Parkinson, Alzheimer, fibromialgia, síndrome de fatiga crónica, el cáncer,…y todas las enfermedades degenerativas pueden curarse. Es previsible que tenga aplicación en todas las enfermedades.
En el cáncer es muy importante la ingesta de agua de mar isotónica diluida, ya que es un alcalino natural que regula todas las funciones corporales (el pH del agua del mar está entre 7.5 y 8.4). Las células cancerosas se desarrollan en un medio ácido, por ello es necesario alcalinizarlo para frenar su desarrollo.
El agua de mar, además de llevar todos los elementos de la tabla periódica diluidos en ella y en forma de oligoelementos, contiene vitaminas, proteínas, aminoácidos, iones… Actualmente se comercializa el agua de mar.
Desmentimos Mitos
Hay una serie de mitos que tenemos que desmentir:
El agua de mar está contaminada con microbios de procedencia terrestre:
El ecosistema marino tiene un gran poder de depuración, y la materia orgánica no lo ensucia. Se ha comprobado que un microbio terrestre no puede vivir en el mar. El mar puede tener aceites e hidrocarburos en su superficie, o metales pesados en el fondo. El fitoplancton transforma lo químico inorgánico en orgánico (plutonio, uranio y todos los metales pesados) como las plantas de la tierra, que también hacen dicha transmutación.
En alta mar los peces y mamíferos marinos no padecen de enfermedades infecciosas porque se nutren orgánica, biodisponible y alcalinamente con la sopa marina que los humanos despreciamos.
Hoy en día ya son 800 las plantas que se están cultivando con agua de mar hipertónica, es decir, sin desalinizar, en varias partes del planeta como en México, Perú, Países árabes,…
El agua de mar tiene aplicaciones científicas desde 1904 con los estudios de René Quinton, y actualmente se ha vuelto a demostrar en esta década, de acuerdo a los protocolos de la Comunidad Europea. Tiene aplicaciones en la agricultura y ganadería. Los Humedales Artificiales de agua de mar o las Marismas de Eritrea y México así lo han demostrado. La Salud Pública tiene en la sopa marina del agua del mar una herramienta de prevención y curación que ha sido despreciada hasta ahora.
No son las plantas las mayores descontaminantes del planeta, son las aguas del mar que ocupan el 70% de la Tierra y absorben infinitamente más CO2 que las reservas forestales.
Así que podemos afirmar que el agua de mar no ha perdido sus propiedades.
Produce insuficiencia renal (tapa los riñones):
El agua de mar es orgánica, reequilibra nuestro organismo. No tiene nada que ver con la composición química que tiene la sal común. El agua de mar tiene los mismos componentes que nuestra sangre, pero más concentrados. Nuestro líquido intersticial es salado, 9gr. de sales por litro. Nuestra sangre es como el agua de mar pero más diluida.
Si un náufrago bebe, se muere: La Fundación Aquamaris y la Universidad de La Laguna, en el año 2003, financiaron en la Zeja (Fuerteventura) un naufragio voluntario y se comprobó que con agua de mar se puede sobrevivir varios días (http://www.aquamaris.org/) El experimento se realizó tomando, cada 20 minutos, la cantidad de agua de mar que cabe en la mano, dejándola en la boca para ensalivarla y así reducir su salinidad.
No se puede tomar si se tiene hipertensión. Otro mito.
Usos del agua de mar
Para la cocción de alimentos
Limpieza bucal: En forma de enjuagues o para cepillar los dientes, ya que previene y ayuda a eliminar la inflamación de las encías y sangrado.
Limpieza de la nariz: Limpiar diariamente las fosas nasales con pulverización de agua de mar isotónica, que es precisamente la concentración de sales de nuestro organismo.
Kimpira es un estilo de cocción de verduras de raíz que consiste en un salteado largo con aceite de sésamo, muy poca agua y, al finalizar, se les añade un poquito de salsa tamari.
Durante el invierno las raíces acumulan la mayoría de nutrientes.
La raíz de bardana (rábano negro) es muy yang, depurativa de la sangre, revitalizante y adecuada para el reuma. Se usa como antibiótico natural.
La zanahoria es rica en fibra , ácido fólico, potasio, calcio, magnesio y antioxidantes, además contiene betacarotenos, que nuestro organismo transforma en vitamina A. Su contenido en vitamina C, especialmente en las hojas, es mucho más elevado que el de las naranjas. Es una raíz muy adecuada para todas las patologías digestivas. Pelada y hervida, como alimento diario, es ideal para la celiaquía. Además, por su porcentaje en fitoquímicos es anticancerígena. Este alimento contribuye a mantener nuestra vista, aumenta las defensas, disminuye el colesterol y previene la arteriosclerosis.
Ingredientes para preparar Kimpira
2 raíces de bardana peladas y cortadas oblicuas y finas (1mm de grosor)
2 zanahorias cortadas del mismo modo que la bardana
1 cucharada sopera de aceite de sésamo
1 cucharada sopera de jengibre rallado
1 cucharada sopera de tamari
Sal marina
Agua
Raíz de bardana
Preparación:
Poner la cazuela al fuego. Verter el aceite y cuando esté caliente echar primero la bardana para saltearla. Después bajar el fuego y añadir una pizca de sal.
Cuando la bardana esté medio tierna, se añade la zanahoria y un poquito de agua para que no se quemen. A continuación tapamos.
Se deja cocer a fuego lento durante 10 minutos. Si ya están bien cocidas se apaga el fuego y se añade el jengibre y el tamari.